Desde hace un par de años, comencé a apasionarme por llevar una vida más sencilla y tranquila. Una de las cosas que me ha ayudado a lograrlo es reducir el número de prendas en mi armario.
Solía pensar que tener más ropa era igual a tener más opciones al vestir. Había creado el hábito de ir de compras frecuentemente con el afán de no repetir atuendos, porque lo miraba como algo negativo. Pero me di cuenta de que, lejos de ser feliz con un armario lleno, me sentía muy abrumada. Cada mañana era una lucha para elegir qué ponerme.
Cuando decidí simplificar mi armario, pude notar cambios significativos en mi estilo de vida. Mi forma de pensar sobre la ropa cambió, así como los hábitos de consumo que tenía. Descubrí cinco enormes beneficios que quiero compartir a continuación.
5 Beneficios de tener menos ropa y simplificar tu armario
1. Facilidad para vestir por las mañanas
Desde que tengo menos ropa, ya no tengo fatiga de decisión. Puedo elegir con facilidad mis atuendos y sentirme segura de mis elecciones. Esto me ha permitido ahorrar tiempo, tener claridad mental y disfrutar de mañanas tranquilas.
2. Defines un estilo propio
Depurar y simplificar mi armario me ha llevado a conservar solo mis piezas favoritas; esas que me hacen sentir bien y que disfruto utilizar una y otra vez.
Entendí que repetir la ropa no es algo negativo —como había creído por mucho tiempo—, al contrario, nos ayuda a ganar conocimiento de lo que sí nos gusta usar y de lo que no. Dejamos de seguir ciegamente las tendencias y nos enfocamos en nuestros gustos y valores, lo que nos lleva a definir un estilo propio.
3. Ahorras dinero
Al tener menos ropa y mayor conocimiento de nuestro estilo personal, somos más conscientes de las compras que hacemos. Podemos invertir en prendas de mejor calidad y aún así ahorrar dinero, porque no estaremos consumiendo de manera frecuente ni desmedida.
4. Facilidad en las tareas del hogar
Lavar, doblar y guardar tus prendas se vuelve más fácil cuando tienes menos ropa. No tendrás que lidiar con la acumulación de prendas sucias (o lo que tienes que doblar). Además, podrás organizar tu closet de manera más rápida y duradera.
5. Le das prioridad a lo más importante
Cuando estudié Asesoría de Imagen, entendí que es muy necesario cuidar de nuestra imagen personal para mostrarnos presentables y ser asertivas en el trabajo, en la iglesia o donde sea que vayamos. Y aunque la moda y el estilo son parte de mi trabajo y son temas que disfruto compartir, sé que eso no lo es todo.
Cultivar la belleza interior es algo invaluable y debe ser nuestra prioridad. Cuando hay belleza en nuestro interior, podemos impactar más la vida de otras personas.
Con un armario reducido podemos tener prendas que nos hagan ver siempre presentables, pero ya no perderemos el tiempo en el cuidado de tanta ropa, en ir de compras constantemente o en no saber qué ponernos cada mañana. Tener menos ropa nos puede ayudar a enfocarnos y darle prioridad a lo más importante.
“No se interesen tanto por la belleza externa: los peinados extravagantes, las joyas costosas o la ropa elegante. En cambio, vístanse con la belleza interior, la que no se desvanece, la belleza de un espíritu tierno y sereno, que es tan precioso a los ojos de Dios.”
— 1 Pedro 3:3-4
Simplificar nuestro armario, en pocas palabras, nos ayuda a tener más tiempo y espacio para lo esencial.
Ahora cuéntame, ¿has experimentado los beneficios de tener menos prendas? O, ¿te gustaría comenzar a simplificar tu armario? Te leo en los comentarios.
Con amor,
Diliam Gioanna